El Ministerio de Hacienda reducirá en un 56,75% el monto asignado a la entidad para 2025.
El presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) , Álvaro Hernán Prada, advirtió que las elecciones programadas para 2026 en Colombia están en riesgo debido al recorte del 56,75% en el presupuesto asignado a la entidad para 2025. En una entrevista con Mañanas Blu, Prada denunció que la reducción de $600.000 millones afecta directamente la organización y supervisión de los procesos electorales previstos, comprometiendo la democracia en el país.
El impacto del recorte presupuestal
De acuerdo con Prada, este ajuste financiero no es solo un “aplazamiento” del presupuesto, como lo ha denominado el Gobierno Nacional, sino una medida que impide garantizar las funciones del CNE.
«Este recorte equivale a la totalidad del presupuesto destinado al componente electoral», explicó. Entre las actividades que quedarían afectadas se encuentran las elecciones atípicas programadas para 2025, como la del gobernador del Putumayo y la alcaldía de Puerto Guzmán, así como los preparativos para los comicios legislativos y presidenciales de 2026.
El presidente del CNE subrayó que la entidad, al haber ganado autonomía presupuestal y administrativa en los últimos años, asume ahora directamente funciones críticas para la transparencia electoral. Estas incluyen la contratación de auditorías externas, la supervisión de los escrutinios, la implementación de plataformas digitales y la capacitación de testigos electorales. “Es una operación que no puede improvisarse. Sin los recursos adecuados, no podríamos garantizar la legitimidad de las elecciones ni cumplir con nuestras funciones constitucionales”, afirmó.
¿Quién asume la responsabilidad?
El presidente Gustavo Petro, a través de un trino, aseguró que el recorte no debería afectar las elecciones, argumentando que el presupuesto electoral principal está bajo la gestión de la Registraduría Nacional. Sin embargo, Prada aclaró que, aunque la Registraduría se encarga de la logística electoral, es el CNE quien supervisa, audita y valida los resultados.
“La Registraduría opera hasta las 4:00 p. m. el día de las elecciones, pero de ahí en adelante, todo el proceso de escrutinio y auditoría es responsabilidad nuestra. Sin los $600.000 millones que nos están quitando, no podríamos siquiera declarar los resultados oficiales”, enfatizó.
Además, Prada señaló que la falta de explicación clara por parte del Gobierno agrava la incertidumbre. «No hemos recibido ningún comunicado formal que justifique esta decisión ni que garantice una solución a tiempo. Necesitamos estabilidad presupuestal para planificar adecuadamente las elecciones», afirmó.
«Los riesgos para la democracia»
El impacto del recorte presupuestal no solo afecta la organización de las elecciones, sino que pone en entredicho la confianza en el sistema electoral colombiano, según dijo.